La máquina de esquí mejora integralmente la coordinación, el equilibrio, la resistencia muscular y los reflejos. Simula el movimiento del esquí y ejercita los grupos musculares superiores e inferiores de todo el cuerpo, lo que supone un gran reto para la función cardiorrespiratoria y la resistencia muscular.
El ejercicio aeróbico intermitente de alta intensidad, debido al rápido aumento de la frecuencia cardíaca durante su realización, implica el trabajo completo de todos los músculos del cuerpo, lo que provoca un déficit de oxígeno. Tras el entrenamiento, el cuerpo mantiene un estado metabólico elevado durante 7-24 horas para compensar este déficit (también conocido como EPOC).-¡Efecto de quemadura!